
El escultor Alejandro Vega Beuvrin nació en mayo de 1979 en Caracas, Venezuela. Desde 2015 trabaja en su taller de Bellas Artes en España, Barcelona. Este arquitecto convertido en escultor, utiliza procesos técnicos modernos para crear piezas en una variedad de formatos diseñados para mantener una relación con espacios urbanos o más íntimos.
Un artista venezolano que no se rindió
Egresado de la Universidad Central de Venezuela en 2004, Alejandro Vega Beuvrin fue inicialmente profesor invitado en el Departamento de Diseño, Arquitectura y Bellas Artes en la Universidad Simón Bolívar, antes de convertirse en investigador de arquitectura en 2010.
Tras las protestas políticas de 2014 en Venezuela, Alejandro Vega Beuvrin decidió montar su estudio de artes en la ciudad de Barcelona para centrarse en la escultura contemporánea.
Su carrera arquitectónica y sus creaciones escultóricas están influenciadas por los espacios urbanos. Su primera creación escultórica en metal fue encargada en 2015 para ser montada en la capital de Venezuela, pero nunca se concretó. Fueron enormes esculturas hechas de láminas de metal cortadas y ensambladas a las que tituló Guarimba y Barricada como referencia directa a la situación en las calles.
El artista recrea la política venezolana en sus obras sin considerarlas como arte de protesta. Como él mismo dice…
«La verdad es que no sé de dónde saco mi inspiración. Me impulsa a crear y esto tiene prioridad sobre la desesperación y la ansiedad que todos experimentamos. Es una salida para mis emociones».
Las esculturas recreadas en la ciudad de Madrid fueron realizadas en acero inoxidable pulido. Éstas generan un gran dinamismo visual de espejos, destellos de luz con ilusión de movimiento, reflejos y vibraciones cinéticas entre entorno y obra. «La propuesta artística busca a través de los planos que se conectan y juegan entre sí, interactuar y establecer un diálogo con el público de la calle, una experiencia única», explica.
Fuente Entorno Inteligente / Unión Radio