La hallaca es nuestro plato más festivo, símbolo de nuestro mestizaje en todos los sentidos. Está formada por una cubierta de masa de harina de maíz rellena de diversos ingredientes, luego envuelta en hojas de plátano y finalmente amarrada con «pabilo» para luego ser cocida en agua caliente
Es típica de la época navideña y más que un alimento, ha llegado a simbolizar todo aquello que nos hermana como hijos de una misma tierra, independientemente de la clase social y de la posición económica.
Los ingredientes del guiso pueden ser muy variados pero entre los más comunes están: aceitunas verdes, pasas, cebolla, alcaparras y tres tipos de carnes (carne de res, de pollo, de cerdo o combinaciones de las mismas). Algunas personas cocinan el guiso por separado y otras se lo agregan crudo, siendo la primera la práctica más común y la segunda llevada a cabo solo en los estados andinos.
Lo más probable es que este plato típico de Venezuela provenga de los esfuerzos que tomaron los españoles en «mejorar» el tamal, uno de los platos precolombinos, expandiendo los ingredientes que componían el relleno. Tales esfuerzos representaron una adaptación colonial al paladar europeo del español en América.
Pero aún pasan los años y la hallaca cada día se afianza más en la mesa del venezolano. Las recetas pasan de generación en generación para conservar todo ese sabor a familia que contiene este paquete verde que esconde en su interior sublimes sabores.
Fuente https://www.2001online.com/zona-3d/241153/la-hallaca–sabor-a-tradicion.html