“Nosotros usamos cacao venezolano para realizar nuestros productos porque es el mejor del mundo, y no lo digo yo, lo dicen las estadísticas”.
“El chocolate es muy caprichoso, hay que prestarle mucha atención y tratarlo con mucho amor para que esté contento y que todo salga bien. El chocolate está vivo, siente lo que tu sientes, si tienes frío él tiene frío, si tienes calor él también. Y es un ingrediente esencial en el amor porque sin chocolate no hay un amor verdadero”.
Yo llamo a Suiza y pregunto: ¿por qué el chocolate reacciona así? —y dije— tal vez porque el chocolate es como las mujeres, porque ellas dicen a veces que están molestas y uno no sabe el porqué, el chocolate también es así, a veces sale bien a veces no quiere nada con uno”
Por María Alejandra Lacruz Mendoza
Cuando se trata de conseguir el mejor cacao del mundo no hay temperatura glaciar en Montréal que nos detenga. Sorteamos la nieve, los menos 27 grados centígrados y, al llegar, vimos ese pequeño aviso rojo y dorado de “Prime Chocolaterie” que invita a detenerse y disfrutar una experiencia de ensueños en esta provincia francófona de Canadá.