Hace tres años, María Gabriela Suárez era una gerente de proyectos en un banco en Venezuela. Al emigrar a este país, sin embargo, tuvo que hacer borrón y cuenta nueva, y dejar su vida profesional en el pasado, a pesar de su preparación y 16 años de experiencia.
Hace tres años, María Gabriela Suárez era una gerente de proyectos en un banco en Venezuela. Al emigrar a este país, sin embargo, tuvo que hacer borrón y cuenta nueva, y dejar su vida profesional en el pasado, a pesar de su preparación y 16 años de experiencia.
“Limpié casas, cuidé a unos niños, después estuve en una tienda y luego conseguí un trabajo de limpieza de oficinas en una de las empresas soñadas para mí, porque tiene que ver mucho con lo que yo hice en Venezuela”, recordó Suárez.
En los últimos años, y debido a la crisis social y política de Venezuela, muchos venezolanos han emigrado a Estados Unidos y Georgia se ha convertido en uno de los estados donde llegan buscando un escape al desabastecimiento y a la falta de oportunidades. Vienen como muchos otros inmigrantes, para darle un futuro a sus familias y apoyar económicamente a los que permanecen allá.
De acuerdo con las últimas estadísticas del Censo, en EE.UU. en 2016 vivían unos 366,000 venezolanos. En Georgia ese número ascendía a unos 10,000, aunque es probable que en la actualidad esa cifra sea mayor.