La bailarina y periodista Eloísa Maturén habla por primera vez de la relación entre el director de orquesta y la actriz María Valverde, de quien dice que «es una gran mujer». Sus diferentes posturas con respecto al chavismo podrían haber hecho mella en la ruptura de su relación en 2015.
Nadie reparó durante el pasado Festival de Cine de Málaga en que el joven con el cabello lleno de rizos que acompañaba a María Valverdeera uno de los directores de orquesta más importantes del planeta.Gustavo Dudamel, venezolano de 35 años, energía en estado puro, volcánico y eléctrico, se mantuvo al margen, discreto, hasta que un reportero captó la imagen que llevó a su portada la revista «Cuore». La actriz y el músico se besaban con pasión.
El chico, nacido en Barquisimeto en 1981(sus padres vivían en un apartamento y le dejaban al cuidado de su abuela Engracia) había conquistado el corazón de la actriz, a la que no se conocía relación desde que acabara su noviazgo con Mario Casas, pareja actual de Berta Vázquez. Pero, ¿cuándo se conocieron? En 2013, ambos coincieron en el rodaje de la película «Libertador», de Raúl Arvelo, de cuya banda sonora era autor Dudamel y en la que Valverde interpretada a la esposa del líder. Él es una persona extrovertida, de amena conversación y llena de energía, y la actriz, de 26 años, se muestra muy cercana a quienes están a su alrededor, por lo que no es extraño que comenzaran a hablar entonces.«Yo la conozco desde aquel rodaje. Además, cuando María estuvo en Los Ángeles nos vimos. Tengo que decir que es una chica muy especial y una gran mujer», asegura a LA RAZÓN Eloísa Maturén, ex del director de orquesta, bailarina y periodista y hasta su separación quien llevaba personalmente la impresionante carrera del artista. No hay un atisbo en sus palabras de recelo, todo lo contrario.
La pareja, un auténtico emblema en el mundo cultural de Venezuela, se casó en 2005 tras un noviazgo muy corto: se vieron en un concierto, él se fijó en ella, se intercambiaron con prisa los números de teléfono y los perdieron, recuperaron el contacto y a los siete meses se casaron. Una historia de cuento. Diez años ha durado su matrimonio. A principios de marzo presentaron la demanda de divorcio alegando que tuvieron «diferencias irreconciliables», no se pronunciaron públicamente sobre el tema y firmaron los papeles a comienzos de 2016. «Todo lo hemos hecho con calma, primando el amor y la amistad que nos tenemos y pensando en los años compartidos y, sobre todo, en nuestro hijo Martín, que siempre nos mantendrá unidos», dice Maturén.
Dudamel y Marturet se casaron en 2004
Quizá las posturas opuestas sobre la extrema situación que se vive en su país hayan hecho mella en la convivencia. Parte de la familia de Maturén aún está en el país, lo que preocupa a la bailarina. En Caracas residen su madre, su hermano de sangre (pues su padre se separó, se volvió a casar y tiene otros dos hermanos) y su abuela. El país atraviesa una situación límite que define como «insostenible» y se muestra bastante preocupada por «la manera de atornillarse en el poder» de quienes gobiernan.
Dudamel, sin embargo, goza del favor del regimen chavista, que incluso le ha condecorado. Nunca se ha pronunciado al respecto y meses atrás respondió a las duras críticas sobre su silencio a través de un artículo publicado en «Los Angeles Times» el pasado mes de septiembre («Why I don’t talk politics», «Por qué yo no hablo de política»), en el que justificó su imparcialidad para proteger «El Sistema», aunque eso no signifique –dijo– que carezca de «compasión o creencias». «‘‘El Sistema’’ es demasiado importante y debe mantenerse por encima de las luchas», escribió. Se refiere al Sistema de Orquestas de Venezuela creado en 1975 por José Antonio Abreu, su mentor, y que ofrece educación musical gratuita a los jóvenes del país que carecen de recursos. El director es su figura más representativa y ha llevado la orquesta por todo el mundo.