Los pasajeros del vuelo 3013, cancelado por Conviasa el pasado martes 22 de julio, cumplieron ya 48 horas varados en Madrid. A las 11:00 am el jefe de operaciones de Conviasa en España, Fernando Riego, aseguró ante la audiencia de 220 venezolanos que la aerolínea ya había conseguido avión a través de la compañía de charter Privilege y que se encontraba en el aeropuerto Adolfo Suárez de Barajas, pero a las 5:30 pm volvió para informar que Conviasa aún no tiene aeronave pues no se logró un acuerdo con la empresa.En seis horas y media para los venezolanos la espera volvió a extenderse de forma indefinida y la credibilidad de la compañía de nuevo se puso en duda.
Riego agregó que los pasajeros deberán aguardar por lo menos hasta el jueves cuando volverá con nueva información (algunos dicen que será la misma: no hay avión). Entre los viajeros la impaciencia creció, pidieron la indemnización económica establecida en la norma del Parlamento Europeo y que la empresa se reuniera a evaluar cada caso. La respuesta de Conviasa no varió: no hay compensación económica y Riego agregó que ya había pagado de su bolsillo paquetes de pañales, otros pidieron entonces desde pastillas para para dormir hasta toallas sanitarias, pasando por cigarrillos y servicio de lavandería. Las reuniones cara a cara quedaron descartadas y el representante hizo entrega de una planilla de incidencia fotocopiada de Conviasa para quienes desearan introducir el reclamo.
Autobus de reclamos
Los viajeros habían decidido no ir al Consulado de Venezuela en Madrid ante la afirmación de que el vuelo con Privilege estaba previsto para la noche de este miércoles. Ya sin cordialidad hablaban de abogados, demandas y protestas. Por grupos los venezolanos decidieron irse al aeropuerto de Barajas.
En el hotel Axor Feria hay servicio de transporte gratuito hasta el aeropuerto, así que desde las 6:30 pm autobuses de 20 pasajeros arribaban llenos cada media hora a la Terminal 1, donde se encuentra la oficina de Conviasa que ha estado todo el dia cerrada, y donde en la taquilla de Información del Aeropuerto y Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), pedían uno a uno la planilla de reclamaciones para exigir la indemnización económica y denunciar la violación de sus derechos. En un mismo vehículo los acentos se mezclaban: maracuchos, gochos, guaros y caraqueños.
La impaciencia por los compromisos laborales y por no poder dar a sus hijos comodidades, pues los niños encerrados en el hotel comenzaban a inquietarse, va en aumento. Quienes aún tenían 20 o 50 dólares aprovecharon la visita para cambiar a euros. «Estamos presos en este hotel», esa era la frase más repetida por los viajeros y aunque Riego insistía en que hay libre tránsito, los viajeros repetían: «¿Y con qué me muevo si no tengo divisas?».
Los viajeros que perdieron las conexiones nacionales, hacia destinos como Maracaibo, San Cristóbal, Barquisimeto y Maracay, se encuentran doblemente angustiados ya que Conviasa no se ha comunicado con ellos para asegurarles que a la hora y el día en que lleguen tendrán un asiento para volver a sus hogares. Otra de las inquietudes de los viajeros es qué pasará con quienes debían volar este jueves con Conviasa, si se sumarán nuevos venezolanos atrapados en Barajas.
Fuente: El Nacional
